Según la compañía de seguridad empresarial Proofpoint, los ciberataques crecieron durante la cuarentena. Principalmente, avanzaron con las noticias falsas que utilizaron la tendencia del COVID-19 como la puerta de entrada para el robo de información personal y la generación de pánico. En esta misma línea, de acuerdo con la Asociación Argentina de Lucha Contra el Cibercrimen (AALCC), durante la cuarentena se observó un incremento de delitos, como la extorsión online, el phishing y el fraude.
Esta tendencia hizo que los riesgos cibernéticos se colocaran como uno de los ramos más dinámicos. Sobre el tema, el reporte “El estado de la resiliencia cibernética” encuestó a más de 660 tomadores de decisión sobre riesgos cibernéticos a nivel mundial (incluyendo 162 en América Latina). Dicho informe analizó cómo son vistos este tipo de riesgos por diversos ejecutivos de organizaciones líderes y mostró que las tarifas de los seguros de cyber se mantuvieron al alza impulsadas, en gran medida, por el continuo aumento en la frecuencia y la gravedad de los reclamos de ransomware. Muchas aseguradoras intentaron endurecer los términos y las condiciones de la cobertura, especialmente en relación con el conflicto en Ucrania.
Operador
Rodrigo Castia, gerente de Líneas Personales de Seguros SURA Argentina, presentó las coberturas que ofrecen desde la compañía en materia de ciberriesgos. “Empresas, pymes y personas físicas mayores de 18 años son quienes pueden solicitar esta cobertura”, comentó el ejecutivo. Agregó que “hasta el momento, la mayor parte de la demanda viene de parte de las grandes empresas, que son las que tienen mayor visibilidad de lo que implica el riesgo. Hoy es más incipiente la demanda del mundo pymes y de las personas físicas”.
Castia explicó que “nuestro producto cyber posee tres secciones. Tenemos, por un lado, Daños Propios, que está compuesta por las coberturas de recuperación de la información digital, interrupción de la actividad empresarial, extorsión cibernética y transacciones fraudulentas. Por otro lado, disponemos de la sección Daños a Terceros, que está conformada por las coberturas de responsabilidad por violación de información confidencial o datos personales, responsabilidad por software malicioso o virus informático y publicación en medios digitales”.
Por último, está la sección de Manejo de Crisis. “En este caso, está compuesta por las coberturas de gastos para la protección a la reputación, gastos de defensa y/o judiciales, gastos forenses y gastos de defensa y/o de autoridades administrativas”, precisó el especialista.
Solución
Castia aclaró que “la solución de cyber no ampara daños materiales ni lesiones personales”. Además, en relación con la siniestralidad, manifestó que “los casos que se presentaron hasta ahora provienen de la interrupción de la actividad y de la recuperación de la información”.
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