Las colocaciones de reaseguro con fecha de 1º de enero de 2019 pusieron de relieve una diferencia de precios entre las cuentas con exposiciones a riesgos máximos o registros de pérdidas y el resto de contratos. Además, en este período de renovaciones muchos reaseguradores hicieron hincapié en la calidad de los clientes. Este es el panorama que Willis Re dibujó del proceso de renovaciones de tratados de reaseguro de principio de año, según resume en su último informe difundido por BDS.
Willis Re añadió que esta tendencia de dos vías en los precios fue especialmente evidente en los contratos de daños con coberturas frente a catástrofes: las cedentes con buenos antecedentes de pérdidas y un proceso de renovación disciplinado y temprano lograron reducciones en las tasas ajustadas al riesgo, mientras que las cuentas con siniestralidad y los clientes considerados de menor calidad están experimentando un aumento de los precios en una serie de líneas.
Las reaseguradoras se beneficiaron, en general, de aumentos de primas cedidas por las grandes compañías, especialmente a través de nuevas cesiones prorrateadas en las que las condiciones se inclinaron ligeramente a favor de los reaseguradores. Al mismo tiempo, la fortaleza de las principales reaseguradoras y la flexibilidad centrada en el cliente siguen siendo la clave del objetivo de las grandes cedentes para amortiguar la volatilidad de los beneficios.
El informe del broker analizó, por otro lado, el mercado de valores vinculados a los seguros (ILS), que se enfrenta a una prueba más exhaustiva en ausencia de un importante aumento de los precios por la erosión provocada por las pérdidas en algunos fondos tanto en 2017 como en 2018.
