El buen nivel de reaseguro ayuda al seguro mexicano a hacer frente a las recientes catástrofes

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México sufrió el pasado 19 de septiembre un terremoto que azotó el centro de México y que contribuirá, junto con otros desastres naturales de este año, a un aumento en la proporción de siniestros para las aseguradoras mexicanas que afectará a su rentabilidad, según el último informe publicado por Fitch Ratings y replicado por BDS. “Es demasiado pronto para determinar si los efectos del desastre tendrán un impacto en el capital o en las calificaciones, aunque el sector asegurador de México en su conjunto está bien posicionado para enfrentar pérdidas por catástrofes debido a la alta calidad de la cobertura de reaseguro y a las bajas exposiciones retenidas en relación con el capital”, detalló la agencia.

El terremoto afectó a varias regiones de las más populosas y económicamente significativas del país, incluyendo Ciudad de México y partes de los estados de Morelos y Puebla. Estas áreas afectadas representan el 49,6% de las primas suscritas a nivel nacional y el 51,6% de las primas por terremotos.

Incluso antes del seísmo, detalló la agencia, los ratios de siniestralidad de las aseguradoras mexicanas aumentaron y era probable que la rentabilidad se viera afectada. Según el regulador local, en junio de 2017 el coste medio de los siniestros había aumentado al 76,5% de las primas, desde el 70,8% del año anterior. Los datos de la Asociación Mexicana de Instituciones y Compañías de Seguros (AMIS) mostraron que los daños ocasionados por huracanes e inundaciones provocaron un pico en los siniestros en el primer semestre de este año. El robo de vehículos asegurados también aumentó considerablemente, lo que provocó un aumento de las reclamaciones.

Sin estimaciones completas de pérdidas y daños, es demasiado pronto para determinar si el terremoto será un evento capital para las aseguradoras mexicanas. En general, sin embargo, las entidades altamente calificadas deberían ser resistentes a los eventos ocurridos hasta 2017. El reaseguro y las fuertes reservas para catástrofes deberían ser un factor de mitigación importante.