En menos de dos décadas, la contribución del mercado asegurador al Producto Bruto Interno (PBI) de Brasil se triplicó: si en el año 2000 representaba el 2%, el año pasado superó el 6%. Aun así, los indicadores de actividad económica muestran que el potencial de crecimiento de este sector es muy alto, según replicó BDS.
El país sudamericano aporta el 2% de las primas de seguro globales y ocupa el 14º lugar del ranking global, pero los expertos estiman que podría alcanzar el 8º puesto en 2020. Uno de los productos aseguradores que está en franca expansión es el de salud, en un país en el que el Estado garantiza la atención médica, pero donde los hospitales públicos sufren la falta de medios y personal, y las largas listas de espera son un hecho. Así, no es de extrañar que casi tres de cada cuatro hospitales brasileños sean privados.
Otro dato que muestra el recorrido que aún tiene el seguro en Brasil lo aporta una reciente encuesta realizada por la Federación Nacional de Previsión Privada y Vida (FenaPrevi). Aunque a la mayoría de los brasileños les preocupa la posibilidad de que suceda algún imprevisto, solo el 18% de la población recurre a la contratación de seguros para protegerse.
